09/10/24

Liderazgo y talento amable: un shot de energía que impulsa a las organizaciones

Talento
Tiempo de lectura: 7 minutos
Liderazgo y talento amable: un shot de energía que impulsa a las organizaciones
Tiempo de lectura: 7 minutos

Varias veces me han preguntado sobre el atributo transversal que busco en mis candidat@s a la hora de entrevistar. Si bien cada posición tiene un perfil técnico y de competencias bien específico, hay un «algo» que siempre busco: el ser amable, o como es conocido mundialmente “be kind”. Estoy convencida de que para cualquier cargo, este atributo es clave. Todos los que trabajamos en organizaciones deseamos tener compañer@s amables. Y tod@ líder quiere un equipo compuesto por personas con estas cualidades. Pero ser amable va mucho más allá de ser simplemente «buena onda». Hablamos de principios fundamentales que hacen una diferencia enorme en el día a día de cualquier organización y equipo. 

¿A qué me refiero con ser una persona amable en el trabajo? Para mí, es alguien que muestra empatía, respeto y colaboración, y busca sumar al bienestar del equipo. Este tipo de personas serán siempre un aporte. Si tengo a un@ candidat@ con dichas características  y además hace match con la cultura organizacional, cumple con las competencias técnicas, habilidades blandas necesarias para el puesto, ¡Bingo!, es un@ tremend@ Talento para la posición. 

Por ejemplo, en roles donde la persona interactúa directamente con clientes, ser amable es esencial para la resolución de conflictos. Una persona empática no sólo escucha activamente, sino que también se podría anticipar a las necesidades del cliente, proponiendo soluciones que satisfagan a ambas partes. Cuando surgen problemas, una persona amable podría abordar la situación validando las emociones del cliente, manteniendo un tono respetuoso y resolviendo de manera proactiva, lo que no solo podría aliviar tensiones sino que también generar confianza.

Y esto no aplica únicamente a roles de atención al cliente. La resolución de conflictos internos es una realidad en casi cualquier puesto. Todos hemos sido testigos de cómo una persona amable puede ayudarnos a destrabar una situación compleja, y ¡qué grato es trabajar con gente así!

Uno de los estudios más relevantes sobre la amabilidad y empatía en el trabajo es el realizado por McKinsey & Company, donde el psicólogo Jamil Zaki de Stanford argumenta que la empatía es una especie de «superpoder» en el lugar de trabajo. Zaki menciona que la empatía mejora no solo la productividad, sino también la cohesión de los equipos y la innovación. Esto, como bien señala en el artículo «It’s Cool to Be Kind», habla sobre  la importancia de fomentar la amabilidad en todos los niveles organizacionales.

Y aquí no puedo dejar de destacar la importancia de la amabilidad en l@s líderes. L@s jef@s que son amables y empátic@s tienen un impacto significativo en la retención de talento y en la productividad de sus equipos. Un estudio de Harvard Business Review mostró que l@s jef@s empáticos logran equipos más comprometidos y leales, creando entornos donde las personas se sienten seguras para expresar sus ideas y superar desafíos con confianza.

Con todo esto en mente, creo que es fundamental priorizar la búsqueda de talento amable. Al final del día, las habilidades técnicas son indispensables, pero lo que realmente marca la diferencia en una organización es el tipo de personas que forman los equipos. La amabilidad, empatía y colaboración son atributos que generan un ambiente de trabajo positivo y altamente productivo. Así que, la próxima vez que busques talento, pregúntate: ¿Es esta persona amable y puede contribuir al bienestar de mi equipo? Si la respuesta es sí, entonces estás al frente de un@ candidat@ que tiene un componente clave para cualquier rol y organización. Estoy realmente segura que es un componente transversal. 

Y no solo se trata de lo que buscan las organizaciones, sino también de lo que l@s candidat@s deben considerar al momento de entrevistarse con su futura jefatura. Siempre les digo a mis candidat@s: elige con cuidado tu próximo desafío profesional. Una de las preguntas que sugiero hacerse post entrevista: ¿La persona que será tu jefe fue amable contigo? ¿Hiciste fit en términos de valores y principios? Porque sí, es fundamental que tu líder cuente con las competencias técnicas esperadas, que inspire, motive y tenga una visión estratégica clara, de eso no hay dudas, pero súmale a la ecuación que sea un@ líder amable, esto te prometo que marca muchísimo la diferencia. Este tipo de líder trasciende, dejará una huella duradera en tu crecimiento, no solo profesional, sino también personal. Un@ líder amable se convierte en un@ verdader@ mentor@, alguien que te acompañará en tu desarrollo y será un apoyo incondicional a lo largo de tu carrera profesional.